La Ley del Teletrabajo publicado el 9 de julio, referente al Trabajo a Distancia, es la consecuencia al crecimiento de modelos de trabajo remoto que, de forma masiva, aparecieron durante la pandemia. En ella se describen todos los aspectos de esta nueva modalidad de trabajo
Esta nueva ley tiene intención de regular de la mejor manera posible esta forma de trabajo. Por todo ello, es necesario un esfuerzo normativo de una entidad mayor que establezca claramente los límites de la práctica del teletrabajo pero que, permita a su vez, desplegar todas sus posibilidades. Las distintas Comunidades Autónomas han acogido, el desarrollo de la nueva ley del trabajo remoto con optimismo.
La ley se aplica si se cumple el siguiente requisito: realización del trabajo a distancia como mínimo durante el 30% de la jornada laboral o bien proporcionalmente a la duración del contrato de trabajo.
La normativa que entra en vigor con la nueva ley del teletrabajo se sustenta en estos puntos principales:
Se establece que debe contener como mínimo: el horario del trabajador, el porcentaje del trabajo a distancia, gastos y forma de compensación, medios y equipos necesarios para el desarrollo de las funciones del trabajador. Además, se debe incluir:
El Real Decreto del Teletrabajo establece que, en aquellos contratos de prácticas, formativos y de aprendizaje, se debe realizar, como mínimo, un 50% de manera presencial y se debe garantizar medidas referentes a:
La empresa debe proporcionar los medios que necesita el trabajador para realizar sus labores y compensar los gastos directos e indirectos que se puedan ocasionar por el trabajo a distancia y recaer en el empleado. Se especifica que los gastos indirectos se refieren a los gastos de uso y consumo de la persona trabajadora o de cualquier otro que pudiera tener como consecuencia del trabajo. Para realizar la negociación sobre los mecanismos de compensación se llama a la negociación colectiva o convenio colectivo y, poder evitar así, la posible renuncia al puesto de trabajo y la pérdida de talento.
El artículo 5 establece de manera explícita que el trabajo a distancia será voluntario para la persona trabajadora y para el empresario. La ley señala de manera clara que el acuerdo se debe realizar de forma escrita y firmado, ya sea en el mismo contrato o de forma posterior. En ningún caso se podrá extinguir la relación laboral en el supuesto de que exista una negativa por parte de la persona trabajadora a cumplir el acuerdo.
Existen sanciones en caso de incumplimiento de la nueva Ley y se establecen del siguiente modo:
En caso que el empresario no proporcione las medidas necesarias al trabajador, y éste tuviera que realizar el trabajo con medios propios (por ejemplo, con su ordenador personal), es considerada una infracción grave lo que supone una sanción de hasta 7.500 euros, ante los 6.250 euros que suponían hasta la fecha.
La cuantía de las sanciones muy graves también ha aumentado de los 187.500 euros a los 225.018 euros en este último año. Además, hay otro cambio, las sanciones en relación de prevención de riesgos laborales, que, en su grado máximo, pueden llegar hasta 983.736 euros.
