Encontrar el talento adecuado por nuestra empresa ya suele ser una tarea compleja y laboriosa, pero lo que a veces no tenemos cuenta es, una vez hemos conseguido captar a la persona idónea para un puesto concreto, ¿Cómo hacemos que no quiera abandonar?

Las causas del abandono laboral se pueden dar por muchos motivos, que pueden ocasionar una fuga de talento que dañe nuestra empresa con la falta de perfiles de valor.

¿Por qué se produce fuga de talento en mi empresa?

Según estudios del sector, un trabajar toma la decisión de abandonar su puesto de trabajo durante los primeros 6 meses. Además, un dato a tener en cuenta es la tasa de desempleo, que aumentó un +17% en 2020 en España (tas de desempleo en 2019: 13.8%), derivado de la situación social y económica.

Exceso de tareas y colapso

Teniendo en cuenta la situación social, sanitaria y económica, muchas empresas han hecho uso de ERTE para seguir adelante en la crisis. Este hecho, hizo aumentar la carga de trabajo a un menor número de personas. El trabajo que antes realizaban varios miembros de un departamento, ahora solo se reparte entre dos o una única persona. Este hecho, causa sobrecarga laboral, generando una situación insostenible a largo plazo.

Falta de trabajo en el día a día

En contra del punto anterior, la aplicación de muchos ERTE ha creado el caso contrario, un parón en la actividad laboral de ciertos profesionales. Pero, esta situación puede darse en cualquier momento y generar una desmotivación y frustración que suele desencadenar abandono y una fuga de talento.

Falta de reconocimiento del talento

Esta situación puede aparecer de dos formas. Por un lado, si dentro de nuestra propia organización no sabemos identificar el talento que ya tenemos, nunca podremos ofrecerle lo que necesita y cumplir con sus expectativas.

Por el otro lado, en el caso de una nueva incorporación. Ofrecer falsas expectativas y no darle al nuevo talento lo que se le prometió, genera la misma reacción que en los casos anteriores.

Replanteamiento personal

En ciertas circunstancias podemos pensar en un cambio de profesión o sector, que puede venir dado por muchos aspectos, y no siempre negativos. En estos casos, el abandono del puesto de trabajo puede ser más complicado de remediar, pero el talento que queremos mantener debería poder tener a posibilidad de permanecer en la empresa con un rol diferente al que hasta ahora tenía.

¿Cómo evitamos la fuga de talento?

Estos son algunos aspectos que podemos mejorar para evitar que el talento decida abandonar su puesto laboral:

1. Acompañamiento en los primeros meses: los primeros meses en un nuevo puesto pueden ser complicados, y tener un apoyo, ya sea por parte del equipo de recursos humanos como el propio departamento al que se pertenece, hace que las gestiones diarias sean muchos más amenas.
2. Tener un canal de comunicación con recursos humanos: una vía de comunicación para tratar temas de carácter personal relacionados con aspectos económicos, beneficios sociales, etc. Puede reducir posibles inquietudes.
3. Buen ambiente laboral: la buena relación con el equipo es fundamental para mantener un estado mental bueno y una motivación a la hora de trabajar en equipo. Este aspecto también es aplicable a la relación con nuestro superior.
4. Cultura de empresa: una empresa dedicada al bienestar de los trabajadores aporta un mejor ambiente y cohesión entre todo el equipo.